La olvidada ermita de San Juan
De Cedillo nos asombra su esbelta torre, airosa y sólida, que le dio un apellido; sin embargo en Cedillo de la Torre hay otro lugar mimetizado ya en su entorno, la ermita de San Juan, una de las más antiguas de la provincia. San Juan, de posible origen visigodo, en tierras de la comunidad de Maderuelo, es una ruina reciente, si es que reciente significa que se derrumbó en el siglo XX.
Se trataba de un templo rectangular y mediano tamaño, de oscuro origen, construido en mampostería y sillarejo, del que quedan únicamente parte de sus cuatro muros perimetrales en lo alto de un cerrete al lado de la carretera que lleva desde Cedillo a Bercimuel.
Parte de la fábrica aún conserva buenos sillares y restos de la cal que una día tuvo. La imagen del santo titular, San Juan Bautista, que se conserva en la parroquia de Cedillo, es la prueba de la supervivencia de este templo, que debió tener cierta importancia para la zona en la Edad Moderna.
Dicen en Cedillo que no hubo acuerdo con el Obispado de Segovia para su reconstrucción, por lo que sólo sus ruinas presiden la inmensa campiña del noreste segoviano, confundiéndose en colores con su entorno.
Una necrópolis en la inmediaciones y algunos de sus sillares hicieron pensar que el templo podría ser bastante antiguo, incluso visigodo, pero nunca se ha llegado a demostrar.
¿Qué tal una ruta para conocerlo?
Cedillo, pueblo de la sierra de Pradales, entre los ríos Riaza y Duratón, además de contar con una de las torres de iglesias de mayor altura de la provincia, permite disfrutar de la naturaleza en plenitud; encinar y sabinar se juntan en su monte de "La Hoz", que tiene además un especial interés cinegético.