San Roque, dos por uno...
A pocos metros del cauce del rio San Juan, en la carretera que une las dos Castrosernas, la de Arriba y la de Abajo, encontramos la ermita de San Roque. El templo es relativamente reciente pero, a su lado, los escasos vestigios de una ermita precursora parecen marcar el límite territorial entre estos pueblecitos de las tierras de Prádena, como no, en la comunidad de Sepúlveda.
Castroserna de Abajo y Castroserna de Arriba se alternaron a lo largo del tiempo en atribuirse la posesión de esta ermita, que llegó a pertenecer, además, a Ventosilla y Tejadilla. Ahora la comparten!!
Muy cerca del actual San Roque, aún pueden verse los escasos restos de una ermita anterior que sirvió sin duda de base para construir la actual. Del primer San Roque únicamente quedan de prueba partes de sus muros, informes y poco informativos, por lo que se considera que está desaparecido casi en su totalidad. Su último registro corresponde al censo de 1952 como ermita adscrita a Castroserna de Abajo. Aún sin estructura visible, un paseo por el río San Juan en este tramo satisfará con creces al caminante curioso.
El río San Juan, un tributario del Duratón, forma un pequeño cañón a su paso por estas localidades. Zona caliza y buitrera, el modesto río San Juan nos anticipa ya en esta zona la magia que veremos más tarde en las hoces del Duratón. Es fácil recorrer parte del cañón desde Ventosilla hasta la ermita de los Remedios, pasando por Castroserna de Abajo por la senda habilitada al efecto. La ruta que verás arriba te ayudará.